Iglesia católica en Chocó pidió a los diferentes grupos armados que haya cese al fuego

La disputa entre grupos armados en Chocó ha cobrado la vida de 180 personas este año, por lo que el obispo de Istmina-Tadó, monseñor Mario Álvarez Gómez, en nombre de toda la Iglesia Chocoana, pidió a estas estructuras un cese al fuego para que no haya “ni un muerto más”.  

En un comunicado, monseñor hizo un llamado urgente a los diferentes grupos armados presentes en estos territorios, para que manifiesten su compromiso con la paz y con hechos concretos para esta Navidad y fin de año hagan un cese unilateral al fuego. Es decir, que otros grupos se sumen a lo declarado por el ELN, de que cesarán las hostilidades por esta época.  

Precisamente frente al anuncio, el obispo destacó que recibieron esta noticia con esperanza “la disposición del Gobierno Nacional y del ELN de iniciar en nuestro territorio, los alivios humanitarios, que nos traigan sosiego y ánimo para seguir la lucha por la paz”. 

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De otro lado, pidió a los excombatientes de las Farc y a las tres ramas del poder del Estado colombiano a cumplir lo que fue pactado en el Acuerdo Final de la Terminación del Conflicto y la Construcción de Paz Estable y Duradera. 

También aseveró que “un signo claro de sincera voluntad de paz debe manifestarse en el respeto a la vida, el cese a las extorsiones, la desaparición de las fronteras o barreras invisibles, el reclutamiento e instrumentalización de niños y niñas, adolescentes y jóvenes”. 

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Desde la iglesia, también llamaron la atención en que los gobiernos locales, el departamental y el nacional continúan atendiendo la crisis humanitaria, social y ambiental con medidas militaristas, cuando en realidad deben “atacar las verdaderas causas de la problemática chocoana, que tiene sus génesis, en la histórica indiferencia del gobierno nacional”. 

A ello se suman problemáticas como la ausencia de políticas públicas, la corrupción y la falta de medios y oportunidades para transformar, de manera sostenible, los inmensos recursos naturales que poseemos, en bienestar.