El juez también ordenó la restitución de tierras a 17 familias de la finca La Galleta de ese municipio.   
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12 Mayo 2020 04:02 PM

El Ejército tendrá que pedir perdón por la masacre de cuatro campesinos en Montebello, Antioquia

El juez también ordenó la restitución de tierras a 17 familias de la finca La Galleta de ese municipio.    

Por la toma de la finca La Galleta donde fueron secuestrados, torturados asesinados, cuatro campesinos, en un caso de falsos positivos, el Juzgado Primero Civil del Circuito le exigió como medida de asistencia y reparación, al Ejército Nacional efectuar un acto público de reconocimiento y pedido de perdón a las familias de las víctimas. En ese prolongado proceso judicial ya fueron condenados a 40 años de prisión dos militares de la Cuarta Brigada y varios integrantes del Bloque Metro de las Autodefensas.

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El múltiple crimen ocurrió la tarde del domingo 23 de enero de 2000, cuando según testigos y víctimas, hombres fuertemente armados y con prendas de uso privativo de las Fuerzas Militares, se tomaron se tomaron el predio con el argumento que era un fortín de subversivos, pintaron las paredes de las casas con siglas de las Autodefensas y secuestraron a cuatro personas.

Gerardo Vega Medina, director de la Fundación Forjando Futuros, celebró el fallo que hace compensaciones económicas a los sobrevivientes de estos hechos de violencia cometidos por paramilitares y Agentes del Estado, Recordó que la hacienda La Galleta era propiedad de la Sociedad Agropecuaria Horizontes, conformada por desmovilizados de la Corriente de Renovación Socialista -CRS- del ELN. El predio fue explotado como proyecto productivo con cultivos de mandarina y aguacate y servía como fuente de empleo para los campesinos de la región. 

Por la masacre, 13 socios abandonaron el predio y el proyecto productivo de una extensión de 133 hectáreas, 5800 metros cuadrados.

En la incursión a la finca La Galleta fueron asesinados, Uberney Giraldo Castro, José Evelio Gallo, exmilitantes de la CRS, el profesor y líder cívico Guillermo Adolfo Parra López y Wilfredo Cañaveral, hijo del presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda de San Antonio. Las autoridades encontraron los cuerpos con señales de tortura en el caserío El Cairo del vecino municipio de Santa Bárbara. Los cadáveres de los dos desmovilizados desaparecieron de la morgue del pueblo. 

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Por estos hechos, en el año 2004 el Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Antioquia, condenó a los suboficiales del Ejército Nacional, Humberto de Jesús Blandón Vargas y Sandro Fernando Barrero, a 40 años de prisión como autores de los delitos de homicidio agravado y secuestro extorsivo ambos en concurso homogéneo y sucesivo. El fallo fue ratificado finalmente por la Corte Suprema de Justicia.