Jorge Jaramillo y Ruth Elena Alzate dejan un legado de 50 años para la cocina antioqueña

Hace una semana, la familia de empleados, funcionarios y amigos de los tradicionales restaurantes El Rancherito estaba celebrando los primeros 50 años de historia y para quienes disfrutan la comida colombiana. 

“Jorge y Ruth no solo fueron pilares fundamental es en la construcción y crecimiento de este sueño llamado El Rancherito, sino también ejemplo de entrega, amistad y amor por la tradición”, es lo que se expresa en una parte del comunicado que fue publicado por la empresa, pero que no detalla lo que significa la pérdida de estas dos personas que siempre reflejaron la importancia del buen servicio en la mesa. 

El accidente automovilístico involucra a un camión y al vehículo de esta pareja, en hechos que se registraron en Puerto Araújo, en la vía que comunica a la ciudad de Bucaramanga con Puerto Berrío, municipio de Antioquia. Desde el momento en el que se conoció la noticia, el hecho conmocionó la comunidad, a los medios y a quienes los conocieron en el mundo de la gastronomía. 

“Agradecemos las oraciones, mensajes de apoyo y muestras de cariño en este momento de profundo dolor”, manifiesta el equipo de El Rancherito en esa reciente comunicación. Además, en ella invitamos a quienes conocieron a estas dos personas a recordarlas con gratitud, alegría y respeto. Hoy esa misma familia llora la partida de una pareja de esposos que le imprimió un sello de alta calidad en la cocina típica de nuestro país. 

Tras este prematuro fallecimiento, cobran mayor relevancia esas cálidas palabras que aparecen en el sitio web del restaurante: Durante todos estos años nos hemos convertido en una casa de puertas abiertas donde la calidez y la buena comida están siempre servidas. 

Quienes conocieron a estos dos emprendedores recordarán por siempre que su negocio alrededor de la cocina era simplemente un pretexto para reunir a los seres queridos alrededor de un buen plato. 

La otra pasión de Jorge Jaramillo y Ruth Elena Alzate era el mundo equino y por eso sus amigos de siempre, los de la Asociación de criadores de caballos criollos colombianos de silla (Asdesilla), transmitieron un sentido mensaje de condolencias: “Expresamos nuestras más sentidas condolencias a sus hijas, nietos, demás familiares y amigos, así como a toda la comunidad de asociados que hoy sienten su partida. Nos unimos en oración y solidaridad en este momento de dolor”. 

Mucha fortaleza para su familia, amigos y allegados es el mensaje que desde muchos otros restaurantes de Antioquia han extendido, lamentando la partida de estos dos queridos empresarios.