
El pasado 6 de mayo se conmemoró el Día Mundial del Asma, una fecha destinada a crear conciencia sobre esta enfermedad respiratoria crónica que afecta a millones de colombianos. Con el lema "Que el asma no te detenga", la jornada busca resaltar la importancia del diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado para que quienes viven con esta condición puedan llevar una vida plena y activa.
Una realidad preocupante en Colombia
Las cifras son alarmantes: se estima que aproximadamente 5 millones de colombianos podrían estar viviendo con asma, lo que equivale a 1 de cada 8 personas en el país. Sin embargo, un dato aún más preocupante revela que apenas 285.000 personas acceden a atención médica cada año por esta condición. Esta brecha evidencia un problema crítico de subdiagnóstico y falta de acceso a tratamientos adecuados.
El asma se posiciona como la segunda enfermedad respiratoria crónica más frecuente en Colombia, solo superada por la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica
(EPOC). Pese a su alta prevalencia, muchos pacientes continúan sin recibir la atención necesaria, lo que compromete seriamente su calidad de vida y, en casos graves, puede representar un riesgo vital.
¿Cómo reconocer el asma?
El asma es una enfermedad crónica que afecta directamente las vías respiratorias, dificultando el paso del aire hacia y desde los pulmones. Identificar sus síntomas es fundamental para buscar ayuda médica a tiempo:
- Tos persistente, especialmente durante la noche o al despertar
- Dificultad para respirar o sensación de falta de aire
- Opresión en el pecho
- Silbidos al respirar (sibilancias)
"Reconocer los síntomas es el primer paso para actuar a tiempo. Silbidos al dormir, sensación de ahogo, tos recurrente o presión en el pecho deben ser señales de alerta para consultar a un profesional de salud. Estos síntomas también pueden intensificarse ante factores como el ejercicio, los cambios bruscos de temperatura, la exposición al polvo, a fragancias intensas o a emociones fuertes", explica la Doctora María Paula Ávila, gerente médico en Sanofi.
Los niños: una población especialmente vulnerable
La situación es particularmente delicada cuando se trata de población infantil. Estudios realizados en Colombia estiman una prevalencia de asma severa de 5,73% en niños y adolescentes entre 5 y 19 años, lo que podría representar alrededor de 91.888 menores viviendo con una forma grave de la enfermedad.
El impacto económico también es considerable. Una investigación realizada en una institución pediátrica de cuarto nivel en el país demostró que los costos de atención varían significativamente según la complejidad del caso: desde USD 38,8 por atención en urgencias, hasta más de USD 2.500 si se requiere ingreso a una unidad de cuidados intensivos. El principal factor que incrementó estos costos fue precisamente el asma severa no controlada.
Las consecuencias del asma no controlada
Cuando el asma no recibe el tratamiento adecuado, las consecuencias pueden ser graves y afectar múltiples aspectos de la vida cotidiana:
- Alteraciones del sueño y fatiga durante el día
- Limitaciones para realizar actividades físicas
- Ausentismo escolar o laboral
- Visitas frecuentes a servicios de urgencias
- Hospitalizaciones recurrentes
- En casos severos, riesgo vital durante crisis agudas
Lea también: Los abusos sexuales en la iglesia ya acechan al papa León XIV
La falta de diagnóstico y tratamiento no solo compromete la salud respiratoria, sino que puede desencadenar un círculo vicioso de deterioro en la calidad de vida del paciente, impactando su bienestar físico, emocional y social.
El camino hacia el control del asma
El panorama no es desalentador si se toman las medidas adecuadas. El diagnóstico oportuno y la adherencia al tratamiento son elementos clave para mantener el asma bajo control. Un paciente bien controlado puede:
- Realizar actividad física sin limitaciones significativas
- Mantener una buena función pulmonar
- Dormir sin interrupciones causadas por síntomas respiratorios
- Asistir regularmente a sus actividades escolares o laborales
- Reducir drásticamente la necesidad de visitas a urgencias u hospitalizaciones
"Cuando el asma está bajo control, es posible realizar actividad física sin limitaciones, mantener una buena función pulmonar y vivir sin que la enfermedad interfiera significativamente en la vida diaria", afirma la doctora María Paula Ávila.
Más información: Once militares ecuatorianos muertos y un herido deja ataque de las disidencias de las Farc
Un llamado a la acción
El Día Mundial del Asma representa una oportunidad invaluable para seguir mejorando el cuidado de millones de colombianos que viven con esta condición. Es un recordatorio de la importancia de:
- Reconocer los síntomas y consultar oportunamente a un profesional de la salud
- Seguir rigurosamente el tratamiento indicado por el médico
- Identificar y evitar los factores desencadenantes específicos
- Mantener un estilo de vida saludable que contribuya al control de la enfermedad
- Educarse sobre el manejo adecuado de las crisis asmáticas
La conmemoración del pasado 6 de mayo nos invita a reflexionar sobre cómo podemos contribuir a mejorar la calidad de vida de quienes padecen asma. Ya sea como pacientes, familiares, personal de salud o comunidad en general, todos tenemos un papel importante en la creación de entornos más saludables y en la promoción del acceso a diagnóstico y tratamiento oportuno.
El mensaje es claro: el asma no debe ser un obstáculo para llevar una vida plena y activa. Con el diagnóstico adecuado, un tratamiento personalizado y el compromiso del paciente, es posible mantener la enfermedad bajo control y disfrutar de una excelente calidad de vida. La clave está en consultar a tiempo, seguir las indicaciones médicas y adoptar hábitos saludables que contribuyan al bienestar respiratorio.
Este Día Mundial del Asma nos recuerda que, aunque se trata de una condición crónica, con el manejo adecuado, el asma no tiene por qué detener a nadie en la consecución de sus metas y sueños.