A prisión 'reclutadora' de La Terraza que enganchaba 'mulas' en Antioquia para enviar drogas a Europa y EE.UU.
Por solicitud de la Fiscalía, una mujer señalada de ser integrante clave de la organización delincuencial La Terraza, que se dedicaba al tráfico transnacional de estupefacientes, fue enviada a prisión.
Lea más: Incendio devasta un parqueadero en Barbosa: pérdida total de 12 vehículos
La medida de aseguramiento en centro carcelario fue impuesta por un juez de control de garantías contra Laura Inés Arroyave Rincón.
Según las autoridades, la mujer estaría directamente involucrada en una red que, entre enero de 2019 y octubre de 2022, habría enviado drogas sintéticas a destinos tan lejanos como Estados Unidos, Europa, Centro y Suramérica.
Las actividades de policía judicial, lideradas por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), revelaron el sofisticado modus operandi de la estructura.
La red reclutaba a hombres y mujeres en varios municipios de Antioquia, persuadiéndolos de viajar como 'correos humanos', ocultando las sustancias ilícitas en su equipaje o dentro de su cuerpo.
Los investigadores evidenciaron que Arroyave Rincón, al parecer, era la encargada de reclutar a estos jóvenes para el envío de estupefacientes. Además, se tiene registro de que habría viajado a Argentina con sustancias alucinógenas con fines de comercialización transnacional.
Es así como un fiscal imputó a la mujer por el delito de concierto para delinquir agravado con fines de narcotráfico. Pese a la contundencia del material probatorio, la procesada no aceptó los cargos.
Cabe destacar que, este proceso se suma a una serie de acciones judiciales contra la misma estructura. Por estos hechos, 30 integrantes de esta red delincuencial ya han sido condenados mediante preacuerdo, incluyendo a tres exintegrantes de la Policía que figuraban entre los sentenciados.
Más noticias importantes
Autoridades ambientales piden preservar la vida del oso andino avistado en Jardín, Antioquia
Las autoridades ambientales en Antioquia y la Alcaldía de Jardín, suroeste del departamento, pidieron a la comunidad proteger la vida de un oso andino que fue avistado por algunas cámaras de la zona rural del municipio.
La solicitud fue realizada debido a que, habitantes del municipio han reportado algunos eventos de depredación de animales domésticos en diferentes veredas que están incluidas en el área de reserva protectora.
Lea más: "La Asamblea de Antioquia y el Concejo de Medellín realizaron debate de control político al agente interventor de Savia Salud
A través de un comunicado, Corantioquia indicó que profesionales adscritos al convenio de fauna silvestre y a la Oficina Territorial Citará se encuentra analizando la información entregada por parte de la subsecretaría de ambiente del municipio de Jardín.
“Todas las evidencias son analizadas rigurosamente con el fin de comprobar la veracidad de cada registro y determinar si las afectaciones están siendo causadas por el oso andino o pueden ser atribuidas a un depredador distinto que también habite al interior del área protegida”, sostuvo.
Además, expertos aseguraron que la dieta del oso andino se basa principalmente en el consumo de material vegetal, como frutos, bromelias, semillas, insectos y carroña.
“El oso andino, conocido como el "guardián de los bosques" y la única especie de oso en Sudamérica, juega un rol ecosistémico vital en los Andes tropicales, beneficiando directamente a los humanos: Dispersor de Semillas: Al alimentarse de frutos y movilizarse por grandes extensiones, el oso dispersa las semillas de su dieta, promoviendo la regeneración y perdurabilidad de los bosques”, aseguró la entidad ambiental.
Corantioquia indicó que, aunque las probabilidades de encontrarse frente a frente con un oso de anteojos es muy baja, puesto que es una especie tímida y prefiere mantenerse alejada del ser humano para evitar confrontaciones, reiteran recomendaciones en caso de avistar este animal:
• Mantener la calma y retroceder despacio y sin hacer ruido para no asustar al oso.
• No mirarlo directamente a los ojos, ya que puede interpretarlo como una amenaza.
• No hacer ruidos ni movimientos bruscos: Cualquier movimiento rápido o sonido fuerte puede provocar una reacción agresiva.
• No alimentarlo ni provocarlo.
• Reportar a las autoridades locales sobre el avistamiento para que puedan hacer seguimiento y asegurar la protección del animal y la zona.