El Ejército retomó control en Anorí, Antioquia: Clan del Golfo secuestró y liberó a cuatro campesinos

Tropas de la Décima Cuarta Brigada del Ejército Nacional retomaron la presencia institucional en el corregimiento de Liberia, zona rural de Anorí, tras la grave alteración del orden público que derivó en el secuestro y posterior liberación de cuatro habitantes de la zona por parte del Clan del Golfo. 

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El coronel Gabriel Andrés Maje Gómez, comandante de la Décima Cuarta Brigada, informó que el despliegue militar se realiza bajo condiciones de alta complejidad, debido a que el grupo armado había cercado el área con campos minados para frenar el avance de las autoridades.  

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El oficial confirmó que, a esta hora, se adelantan operaciones ofensivas que incluyen el uso de fuego de artillería para atacar a las estructuras criminales que mantienen bajo asedio esta zona estratégica del Nordeste antioqueño. 

Esta intervención militar responde a las reiteradas alertas del gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, quien previamente había denunciado la vulnerabilidad de la población civil en Liberia ante el control territorial de actores armados. La región de Anorí enfrenta actualmente una violenta disputa entre estructuras criminales que luchan por el dominio de las rutas del narcotráfico y las rentas derivadas de la minería ilegal, dejando a la comunidad en medio del fuego cruzado. 

La importancia de Anorí: para el Clan del Golfo

La vereda Liberia, en Anorí, representa un activo de alto valor estratégico para el Clan del Golfo debido a su ubicación como corredor de movilidad entre el Bajo Cauca y el sur de Bolívar. Esta zona permite al grupo armado conectar rutas de narcotráfico y asegurar el movimiento de suministros y combatientes, convirtiéndose en una retaguardia clave para evadir la ofensiva militar. 

Además del factor económico, el control de Liberia le permite al grupo armado ejercer una dictadura local y control social sobre la población civil. Mediante la siembra de campos minados y actos de intimidación, como los recientes secuestros, buscan blindar la zona contra el avance del Ejército y la incursión de grupos rivales como el ELN o las disidencias de las FARC. Para el Clan del Golfo, perder esta vereda significaría perder el "corazón" de sus operaciones logísticas en la región, lo que explica la ferocidad de los enfrentamientos y la resistencia ante las tropas de la Décima Cuarta Brigada.

Otros puntos del conflicto en el nordeste de Antioquia 

Persiste la tensión en el municipio de Segovia, nordeste de Antioquia, Luego de varias horas de enfrentamientos entre grupos armados ilegales en la vereda Arenales, una hora del casco urbano del casco municipal. 

El conflicto involucró directamente a integrantes del Frente de Guerra José Antonio Galán del ELN y a la subestructura Jorge Iván Arboleda Garcés del Clan del Golfo. 

Tras el despliegue de verificación, el Ejército Nacional informó que, mediante fuentes humanas en la zona, se pudo establecer que los actores armados ya no se encuentran presentes en el sector mencionado.  

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A pesar de la intensidad de los choques, las unidades militares confirmaron que la situación ha retornado a una relativa calma en el punto específico de la incursión. 

Finalmente, el balance oficial entregado por las autoridades es de tranquilidad en cuanto a afectaciones personales, señalando que no se registraron personas fallecidas, heridas ni víctimas de desplazamiento forzado.