Empleada bancaria condenada 7 años de cárcel por participar en el hurto de $400 millones en Sabaneta, Antioquia

Un juez de conocimiento condenó a Jenni Marcela Ortiz Díaz a siete años de prisión por el delito de hurto calificado y agravado, luego de hacer parte de una peligrosa banda criminal que hurto 435 millones de pesos de la entidad bancaria en la que trabajaba en el municipio de Sabaneta, sur del Valle de Aburrá. 

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La decisión judicial se basa en una investigación liderada por un fiscal de la Seccional Medellín, que probó que Ortiz Díaz, quien se desempeñaba como cajera principal se apropió de la millonaria suma de dinero 

Según la Fiscalía, el hurto ocurrió la tarde del 12 de diciembre de 2024. La mujer, aprovechando su posición, ideó un plan para cometer el delito:  De manera cordinada Desconectó y alteró las cámaras de seguridad de la entidad; Llamó a la central bancaria para que le autorizaran la apertura de la bóveda donde estaba guardado el dinero. Por último, le pidió a un compañero que saliera de la sede para recibir un supuesto domicilio que ella misma había solicitado. 

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Una vez con el dinero, que fue sacado en una tula, la sentenciada no regresó más a su lugar de trabajo.  La investigación permitió la captura de Ortiz Díaz por parte de la Policía Nacional en enero de este año. 

Durante el proceso, la defensa de la condenada solicitó el beneficio de la prisión domiciliaria alegando una enfermedad grave. Sin embargo, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses no certificó dicha condición. En consecuencia, el juez ordenó que la sentenciada cumpla su pena en el establecimiento carcelario que determine el Inpec. 

Cómo fue la captura de  esta mujer

En enero de este año, las autoridades lograron la captura de una mujer de 37 años, señalada de sustraer más de $436 millones de pesos de una entidad bancaria

Un equipo especializado de investigadores de la Sijín se encargó de la recopilación de pruebas contundentes. El análisis de 26 videos de seguridad y la recolección de otros elementos materiales probatorios fueron fundamentales para identificar a la presunta responsable.

Así las cosas, la policía logró obtener una orden judicial de captura, que fue ejecutada en el barrio Enciso de Medellín.