El socorrista que acompañó a Omaira Sánchez en su agonía y la vio morir en sus brazos

Gustavo Heraclio Lastra Lastra, tenía 21 años de edad cuando se produjo la erupción del Cráter Arenas en el volcán nevado del Ruíz que borró del mapa a la población de Armero, en el Tolima, era socorrista de la Defensa Civil en Ibagué, de inmediato a alistó y salió hacia el sitio de la tragedia donde por cosas del destino, se encontró con la niña Omaira Sánchez, a quien acompañó hasta su último suspiro.

Lastra en entrevista con La FM, cuenta que desde los patines del helicóptero, en los que iba sentado, divisó "una cabecita negra" en medio del mar de lodo y le pidió al piloto que lo dejara en un montículo cercano donde pudiera aterrizar para inspeccionar  el lugar donde había visto a la niña.

Luego de ubicarse, caminó varios minutos y llegó al sitio donde la pequeña Omaira estaba con el agua arriba del cuello, lo primero que hizo fue tratar de sacarla un poco porque tenía su boca y nariz casi tapados por el aguarrás, clamó por una moto bomba para succionar pero ninguna de las dos funcionó.

El socorrista relata que todo el tiempo trató de distraer a Omaira hablándole y preguntándole cosas, ella, relata Lastra, en medio de su inocencia le decía que estaba preocupada porque no podía presentar el examen de matemáticas, cantó, rezó varias oraciones, y cuando pasaban los helicópteros les alzaba su manita para saludarlos.

Omaira, la niña símbolo de la tragedia de Armero, acota Gustavo Lastra, permaneció viva tres días atrapada en medio del barro, debajo de ella estaba su tía ya ahogada, que la sostenía sentada en sus hombros. Subraya que no había que darle de comer a la niña, sólo botellas de suero Pedyalite, "yo le daba el suero y de lo que ella dejaba con eso yo la pasé", dice con un leve sollozo.

Finalmente, el sábado 16 de noviembre las fuerzas abandonaron a Omaira, "ella murió en mis brazos",  acota con tristeza el socorrista , uno de los héroes anónimos de Armero, no la pudo salvar pero durante tres días la acompañó en su agonía, le dió ánimo para resistir hasta su último suspiro.

Testimonios de los reporteros de Radio Sucesos RCN que informaron en directo y desde Armero, hace 40 años

Francisco Tulande era el jefe de redacción de Radio Sucesos RCN el 13 de noviembre de 1985, hace 40 años y uno de los reporteros avezados de la radio colombiana. Una semana antes le tocó afrontar el cubrimiento de la toma del Palacio de Justicia por parte del M-19, días y noches en vela y con un ritmo frenético ,sin pausa,en la transmisión en directo de RCN Radio al mando de Juan Gossaín, sin saber que unos días después se avecinaba uno de los episodios más graves en la historia de Colombia.

Tan pronto tuvo los primeros reportes de la lluvia de cenizas y de que algo estaba pasando en el Nevado del Ruíz con la posible erupción de uno de sus volcanes, en la madrugada del 14 de noviembre. Tulande se montó en un carro del diario El Espacio, para el cual hacia algunas notas, y viajó en el baúl hasta el punto más cercano a Armero, a donde se podía llegar.

En las primeras horas del día, cuando apenas aclaraba, Francisco ya estaba al aire contando lo que podía ver y la magnitud de la tragedia. Nos contó en la FM lo que vivió y lo que considera, ha sido, junto con  el holocausto del Palacio de Justicia, uno de sus trabajos periodísticos   más exigentes, reconocidos  y dolorosos que lo marcó para siempre.

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Víctor J. Jiménez, fue otros de los reporteros de RCN Radio al que le tocó salir del cubrimiento de la Toma del Palacio de Justicia en el centro de Bogotá por parte del M-19, hacia Armero, para  informar lo que allí estaba ocurriendo con el deslave originado por la erupción del Cráter Arenas del Nevado del Ruíz que arrasó con esa población tolimense y acabó con la vida de cerca de 25 personas que habitaban el pueblo hace 40 años.

Jiménez, que conocía la zona, porque nació en La Dorada, era prácticamente el baquiano que iba a guiar a sus compañeros para poder llegar lo más pronto al sitio de la tragedia, sin embargo en medio de la confusión, del barro y el agua que cambió la geografía, llegó en el transmóvil de RCN hasta un punto en el que el lodo cubrió las llantas delanteras del vehículo que quedó enterrado hasta cuando con ayuda de lugareños, lo pudieron sacar para iniciar la transmisión de la peor tragedia natural que ha tenido Colombia.

Eduardo Lozano hace 40 años, cuando se produjo el desastre que destruyó la población de Armero en el Tolima, era uno de los periodistas veteranos, con experiencia en hechos relacionados con desastres y noticias de baranda judicial. Era también radio aficionado, tenía buenos contactos con la policía, autoridades judiciales y entidades de socorro.   

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Al igual que otros periodistas de RCN, estuvo informando en directo desde los alrededores de la Plaza de Bolívar en Bogotá, sobre la Toma del Palacio de Justicia por parte del M-19, y una semana después estaba en la población de Guayabal, cerca a Armero, transmitiendo los pormenores de lo que estaba ocurriendo en la explanada que dejó la avalancha.

Escuche los testimonios de estos 4 protagonistas que le contaron a la FM como vivieron la peor tragedia ocurrida en Colombia hace 40 años.